En este convulsionado
mundo agobiado por un sinnúmero de males apocalípticos, una refrescante noticia
arriba del otro lado del Atlántico.
El Impulse 2, el experimental aeroplano impulsado por energía solar, que
partió del aeropuerto JFK de Nueva York, al mando del piloto suizo Bertrand
Piccard, llegó a Sevilla (España), luego de una complicada y larga travesía de
71 horas, para continuar una asombrosa aventura alrededor de la Tierra; hazaña que parece
escrita por la fértil imaginación de Julio Verne, cuando le dio la vuelta al
mundo en 80 días abordo de un globo.
Este silencioso avión fabricado con fibra de
carbono lleva en sus alas 17.248 células solares, vuela a una velocidad de 75
kilómetros por hora, no consume oxígeno, ni expulsa sucias emisiones. Con este
ambientalista proyecto los promotores intentan crear conciencia sobre los beneficios de las energías renovables y el
peligro de los combustibles fósiles que
aceleran el cambio climático y amenazan la armonía del planeta que habitamos.
La aeronave solar se
diferencia del descontinuado Concorde, el avión supersónico comercial más
rápido y ruidoso o del Boeing que desarrolló más de 900 kilómetros por hora en un
reciente vuelo sin escalas desde China a Miami, expulsando gases de efecto
invernadero durante16 horas y media de viaje.
En este mundo tan contaminado
recibimos con satisfacción el uso del calor y la luz del astro rey para obtener
energía limpia y pensamos que siendo la Florida el estado soleado por
excelencia, se debiera aprovechar ese recurso renovable para producir abundante
electricidad a bajo costo. FPL la
empresa que electrifica la Florida, piensa instalar un millón de paneles en
tres nuevos centros de energía solar, desafortunadamente a partir del próximo
año, la luz del sol iluminará con un significativo aumento en la tarifa básica,
incremento que oscurecerá los bolsillos de los golpeados consumidores.
No comments:
Post a Comment