En los años 70 me
encontraba preparando una exhibición dedicada a esos seres fantásticos que
brotan de una imaginación fogosa, cuando un centauro venido del espacio
infinito dejó caer en mis manos el “Manual de Zoología Fantástica, posteriormente
una arpía lanzó sobre mi cabeza “El Libro de los Seres Imaginarios”. Eso fue un
presagio de que algo grande iba a suceder y desde entonces el navegar por las
páginas exquisitamente redactadas por Jorge Luis Borges, se convirtió en una
extraordinaria revelación. De dichos ejemplares me nutrí con ansias, los
dragones tomaron por asalto mi estudio, las medusas se encargaron de mi
insomnio y con la pasión por el dibujo que me acompaña desde niño, recreé de la
mano de Borges, unicornios, ninfas y una cantidad de seres extraños. Hoy
ofrezco a los seres crédulos de esta galaxia, este compendio visual de
criaturas imaginarias como un sentido tributo a Jorge Luis Borges en el trigésimo aniversario del Bakehouse Art
Complex.
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